Tras el periodo vacanional volvemos a la vida cotidiana con fuerzas renovadas o no, eso se irá viendo. Por mi parte asumo el reto de seguir defendiento un trabajo que enriquece y del que aun se conoce poco. Acompañar a una mujer durante su proceso vital, con momentos tan especiales como el inicio de la vida sexual, el embarazo, el parto, la crianza, y el climaterio son las bases de la formación de una matrona y su fundamento laboral ( si no de vida). Es difícil abarcar un campo tan amplio pero a veces tan solo hay que dejarse llevar, a pesar de las propias limitaciones.
Y no me olvido de "los otros", de esos hombres que son compañeros de camino y a los que durante mucho tiempo hemos tenidos relegados "calentando agua", como en las películas de vaqueros, para que no molesten durante acontecimientos tan relevante como la llegada de un nuevo ser a la familia. Hemos de contar con vosotros y al menos algunas estamos por la labor.
Seguiremos pensando como mejorar vuestra participación, y abiertas vuestras sugerencias
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